Campamento frente a Asamblea Legislativa cumple 25 días
El campamento ha servido para que las y los diputados sepan que el pueblo los observa, pero también para unificar las luchas y los diversos sectores sociales, opina Rocío Ramírez, presidenta de Mujeres en Lucha Social.
El campamento es una muestra de la solidaridad del pueblo, pero también del empuje y de la fuerza de la clase trabajadora cuando decide organizarse
Desde el pasado 12 de abril la organización Mujeres en Lucha Social mantiene un campamento frente a la Asamblea Legislativa para protestar en contra de la propuesta de renegociación del préstamo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la propuesta de Ley de Empleo Público; así como por el aumento en el costo de la vida provocado por el paquetazo de impuestos promovido por el gobierno del PAC y aprobado complacientemente por casi todas las bancadas legislativas.
El día de ayer el equipo de Bandera Roja visitó el campamento de protesta social para expresarles nuestra solidaridad y entrevistar a varios de sus principales dirigentes. Nos comentaron también como ha sido la vida en el campamento durante este, ya casi, mes que han estado sosteniéndolo, con muchas penurias, pero con mucha alegría, coraje y solidaridad.
A pesar de los esfuerzos que ha hecho el gobierno, en colaboración con la prensa burguesa por invisibilizar esta iniciativa popular, el campamento ha tenido impacto político y ha servido como lugar de encuentro de organizaciones y movilizaciones políticas. También ha sido útil para planificar y coordinar futuras acciones de protesta.
Rocío Ramírez Varela, presidenta nacional de Mujeres en Lucha Social es una de las personas que, junto con otras compañeras y compañeros, ha estado al frente de la coordinación del campamento desde el principio y ha estado “24/7”, como ella misma dice, desde el primer día. “Estamos con desempleo, demasiados impuestos, demasiadas cargas, este préstamo va a traer más problemas, en donde no hay trabajo; y que posiblemente no resuelva nada, porque este es un gobierno sin llenadera, termina este préstamo y buscan otro más”, planteó la compañera Rocío.
Con relación a los objetivos del campamento, Rocío nos comenta que son básicamente tres: “Para recordarle a los diputados, que tienen una serie de proyectos para aprobar ese préstamo, que no traicionen al pueblo, porque no se los vamos a perdonar. Costa Rica dijo no al préstamo del FMI, claramente. Otro de los objetivos es unir a un pueblo costarricense que ya estaba muy dividido, ahorita ocupamos una unidad nacional: movimientos de lucha social, comunidad LGTBI y toda una serie de activistas de distintas luchas que han pasado por aquí, esto es para esto, para unirnos, porque todos somos pueblo. Me da un gusto decir que aquí hemos tenido venezolanos, colombianos, nicaragüenses, argentinos, ¡rusos!; y mucha juventud ha pasado por aquí, jóvenes que no se involucraban en la lucha, que hoy se involucran en esta lucha social. Y otro de los objetivos es levantar la población a escala nacional, de este campamento ya salieron comisiones, de Rescate Nacional, para ir a levantar a toda la población, para lo que viene, que es lo más difícil, que es la defensa de Costa Rica ya en la calle.”
Dayana Méndez, ha estado en el campamento también desde el primer día; además de estar protestando contra el préstamo con el FMI y sus leyes conexas, en contra de la Ley de Recurso Hídrico, es activista del movimiento de lucha por vivienda. “Nos estamos manifestando también en contra de lo que nos hizo el Ministro de Hacienda, que nos quitó 28 mil millones para los bonos de vivienda” quitándole la posibilidad de acceder a una vivienda digna a la gente que tiene más escasos recursos. Nos cuenta que han recibido mucho apoyo y mucha solidaridad de varios sindicatos, pero también de iglesias o simplemente de ciudadanos que se han acercado a dar apoyos solidarios y a expresar su apoyo a la lucha. “Hemos sido como dos mil personas las que hemos pasado por acá y quinientos jóvenes que tuvimos a cargo, que ya ellos se retiraron a su sector en donde viven, porque están levantando grupos para manifestarse en las regiones, entonces ellos se retiraron el día de ayer, ya los últimos que quedaban, para ir a levantar los grupos que se van a manifestar en distintas partes del país.
Leonel Aguilar Moya nos comenta que tomaron la decisión de colocarse al costado de la Asamblea Legislativa “estamos al puro frente de donde pasan los diputados, para darles presión, porque son ellos los que tienen que ver la necesidad, de lo que estamos pidiendo, que nos vean, que somos gente de bien, que estamos llevando frio, llevando sol, llevando agua; gente que queremos el bienestar para Costa Rica. Aquí estamos personas que somos de sectores públicos, que somos del sector privado, personas desempleadas también, que ellos están luchando por lo mismo. Aquí en Costa Rica hace falta mucho, mucho, empelo, muchos jóvenes que han pasado por aquí nos han dicho: venimos a apoyarlos porque no tenemos empleo. Este campamento no es de los que estamos aquí, es del pueblo costarricense, porque para eso se hizo, es para que todos nos unamos.”
El campamento se ha sostenido con la solidaridad de algunas organizaciones, como los sindicatos, pero también con la fuerza y recursos de los mismos manifestantes o de otra mucha gente, personas del pueblo, que se han acercado a darles solidaridad. Rocío nos comenta que “al principio nos traían comida, ahora estamos cocinando aquí, es mucho más económico que nosotros cocinemos, para cualquier persona que nos quería ayudar, era mejor eso. Tenemos vigilancia durante el día y durante la noche, para que cuando algunos duermen y así para estar haciendo relevos. Compañeros que se han encargado directamente de la cocina, hay días que hay comida, hay días que no había nada, porque así es esto. Hemos tenido mucha colaboración, gente que pasa por aquí y nos deja una bolsita de arroz, una bolsita de frijoles; los agricultores de la Zona de los Santos, de Turrialba, nos han mandado verduras y cosas que nosotros aquí gastamos. El campamento, las tiendas, organizadas; este caballero que está aquí, Mariano, le decimos “Rasta”, es el ingeniero de las tiendas(risas); entonces él se ha encargado de hacer algo ahí que sea más seguro, porque los primeros días se mojaba mucho la gente, a estas tiendas se les filtra el agua, entonces hubo que hacerles un manteado por encima para que estuvieran más protegidas. La alimentación está coordinada, ese matrimonio que ustedes ven allá, siempre nos vienen con gallo pinto, con un poco de arroz con pollo, que ya tienen preparado y nos dan de almorzar. Es una camaradería de todo un país que se ha unido.”
La compañera Ángeles Barrantes ha estado colaborando con la cocina, no se está quedando a dormir, pero ha estado viniendo con su esposo a colaborar con la cocina todos los días. Nos comenta sobre su experiencia. “La experiencia ha sido muy bonita, es primera vez que a mí me pasa esto, la experiencia ha sido muy linda. Me he sentido plena, orgullosa, de la gente valiente que está aquí ¡Que costarricenses más valientes estar bajo las inclemencias del tiempo! Que hay días que solamente comen una vez, hay días que comen dos veces. Hemos traído de parte nuestra a veces donaciones, porque a veces no ha habido, entonces les traigo de mi casa, cocinado o estoy donando el tiempo, con mi esposo, porque somos cocineros. Yo digo que el costarricense puede ayudar de muchas formas, hay gente que no se puede venir a quedar a acampar, por el trabajo, pero pueden apoyar trayendo ayudas: un paquetito de sal, un paquetito de consomé, eso aquí es importantísimo. Vea, hoy estamos cocinando enyucados, con sólo sal y con un poquito de cebolla, pero nos hacía falta el consomé, pero no tenemos. Estamos trabajando con lo que tenemos.”
La compañera cocinera nos comparte las razones por las cuales está colaborando en la cocina del campamento: “Yo estoy en este campamento porque el problema que está pasando con el país nos compete a todos, no podemos decir, que ellos vayan y luchen por uno; tenemos que ya de verdad salir a las calles y apoyar porque el gobierno no quiere escuchar; este gobierno está sordo al pueblo y abierto solo a la corrupción y abierto solo a los amigos de ellos mismos, empresarios. No quieren hacer reuniones con el pueblo que fue el que los eligió, eso sí debemos tenerlo muy claro los costarricenses, ya no podemos quedarnos en nuestras casas, esperando a que sucedan y que sucedan las cosas y que sigan los proyectos de ley, pasando y pasando, contra el pueblo. Ellos están para servirnos a nosotros, no para servirse ellos un gran banquete. Carlos Alvarado no quiere escuchar al pueblo, un mes de estar aquí, al puro frente a la Asamblea Legislativa, ayer estuvo aquí, y ni siquiera se dignó a preguntar porque estamos luchando, pero para pedir el voto si estaba dispuesto, en aquel entonces. Ahora más bien nos cierran el paso, cuando esto es vía pública, todo esto es pagado por nosotros, con los impuestos, estas calles, ese edificio y ellos nos cierran aquí y no podemos ni siquiera irnos a manifestar.”
La compañera Ángeles opina que otra forma de ayudar es difundiendo la información: “Pueden ayudar también compartiendo esto en las redes sociales, porque nos tienen invisibilizados, los noticieros, un montón de noticieros. El pueblo no sabe que aquí hay valientes guerreros costarricenses desde hace casi un mes, pasando noches, en los temporales que hubo, con viento, frío, lluvia y soles fuertes, ¡aquí han estado!, ¡no se han ido! Cerraron las calles ahí los policías de tránsito para que los vehículos no pasen para que la gente no vea el campamento, porque por los árboles y la zona verde, no se ve. Yo quiero decirle al costarricense que venga frente al registro, donde se sacan las cédulas y puedan ver el campamento y se arrimen, a saludarlos y a dar palabras de apoyo, hasta pueden agarrar el micrófono o el megáfono y decirles lo que piensan a estos gobernadores que tenemos, porque la verdad ya es hora de que el costarricense despierte. De verdad que ya el país se está perdiendo, ¡por dormidos!”.
Rocío nos comenta también sobre la invisibilización. La población “se da cuenta de que estamos aquí por los luchadores, por grupos como ustedes, que lo comunican; porque canal seis y canal siete, canal ocho, han pasado por ahí y a esto no le toman, pero ni fotos; ni siquiera se lo hacen ver a la población. El gobierno ha querido invisibilizar este campamento, que le ha golpeado fuerte, porque este campamento empezó el 12 de abril, Carlos Alvarado quería su dichoso préstamo, con el marco de Ley de Empleo Público ya aprobado antes del 30 de abril; no se pudo. Y es que esta presión que ejercemos nosotros aquí claro que es importante, porque cada vez que salimos hablar le recordamos que estamos aquí vigilando.”
El campamento se mantendrá todavía algunos días más, pueden acercarse para darles solidaridad, contribuir con comida o artículos de primera necesidad; pueden también hacer aportes económicos por SINPE Móvil, a través del teléfono 7015 4292 o simplemente venir a acompañar, durante unas horas o quedándose a dormir. También, como ya lo expresaron las compañeras, pueden ayudar difundiendo la información sobre el campamento.