Coincidimos con denuncias de Villalta contra saqueo presupuestario y pesca de arrastre

La lucha es en las calles, no solo en el parlamento

Por David Morera Herrera

En una organización política que aspira a una transformación social profunda, es decir, revolucionaria, no es desdeñable el papel de denuncia que puedan hacer diputadas y diputados, electos trabajosamente, en las condiciones adversas de la farsa de la “democracia burguesa”.

Las denuncias de Villalta son importantes si sirven para impactar a la población y desnudar las triquiñuelas y corruptelas de las clases dominantes y explotadoras. Pero el trabajo parlamentario es cuestión meramente táctica para las y los revolucionarios.  Lo estratégico es impulsar la movilización, consciencia y organización popular hacia adelante, siempre.

Hemos tendido y tenemos diferencias estratégicas y de método (de fondo) con la dirigencia del Frente Amplio, evidenciadas en varias ocasiones y sobre varios temas (por ejemplo:  la Contrarreforma Procesal Laboral). Ahora bien, no somos mezquinos, ni sectarios, reconocemos sin reparos el papel del diputado José María Villalta del FA al hacer fuertes denuncias contra el recorte presupuestario, que desmantela el Ministerio de Cultura, afecta seriamente al PANI, a la Comisión Nacional de Emergencias en plena pandemia y muchos otros recortes, que incrementaran la desigualdad social.  Pero para nada tocan, por ejemplo, a los grandes ricachones evasores y elusores de impuestos, ni los alquileres que contratan a jerarcas de instituciones públicas a exorbitantes costos, a poderosas familias dueñas de edificios como la de Álvarez Desanti.

Así también, respaldamos plenamente las denuncias de Villalta contra el propósito de habilitar la “pesca de arrastre”, que daña gravemente el ecosistema marino. Es un crimen contra la naturaleza tan grave como el aleteo de tiburón. Bien por Villalta.

No obstante, debemos decir que el papel de un diputado que se denomina de izquierda no debe limitarse a las paredes del bunker de la Asamblea Legislativa, donde esperar resultados positivos en las votaciones (con la composición actual), es pedirle peras al olmo. La denuncia parlamentaria (para no pasar de un simple berreo), debe ser una herramienta auxiliar para el objetivo fundamental que es promover, incentivar, organizar la movilización popular de las calles. Y llamamos al diputado Villalta que, cuando correspondan esas movilizaciones masivas y bloqueos, salga del bunker parlamentario y se ponga al frente y a la orden de las y los manifestantes en las calles.

De tal modo, que partiendo del reconocimiento de la justeza de las denuncias que hace Villalta, en este momento crítico para el país, con el más sincero espíritu de buscar la unidad de acción (en las coincidencias, y sin renunciar al derecho a las divergencias en la diversidad de la izquierda), le hacemos ese llamado.