¿QUÉ PRETENDE LA UCCAEP EN EL JUICIO CONTRA DANIEL VILLALOBOS?
¿UNA SENTENCIA ESTABLECIENDO QUE LOS EMPRESARIOS QUE NO PAGAN LA SEGURIDAD SOCIAL NO SON DELICUENTES?
Por Manuel Sandoval
Mañana miércoles, a las 8 a.m., en los Tribunales de San José, culmina el juicio por difamación y calumnias que el empresario Oscar Echeverría Heigol, dueño de Motores de Costa Rica y secretario de la UCCAEP, promueve contra el compañero Daniel Villalobos, el de la pañoleta roja en la foto, uno de los dirigentes de la lucha por la tierra de los otrora trabajadores bananeros de Finca Chánguina y Cuadrante Finca Tres. Hay que ir, no sólo para darle solidaridad a Daniel, que merece todo nuestro respeto y apoyo porque ha sido inclaudicable en esta lucha, sino porque detrás de un juicio que podría verse como una suerte de vendetta del empresario que no logró arrebarles la tierra, hay algo más serio: un intento de la UCCAEP, en medio de la presión que han iniciado los empresarios para rebajar las cargas sociales, para establecer “judicialmente” que los empresarios que no pagan las cargas obrero-patronales a la Caja no son delicuentes.
El señor Echeverría Heigol se presenta como muy “lesionado” por Daniel Villalobos y Patricia Mora, porque el año antepasado en el programa Revista Matutina de Canal Trece dijeron que los empresarios que no pagaban la seguridad social eran delicuentes. (¡Ojalá que no me demande por pensarlo y decirlo yo también!) A Patricia Mora la absolvieron en el juicio anterior probablemente por ser ministra, pero para Daniel se dejó el portillo abierto para que lo llevaran de nuevo a juicio.
Después de la retirada de la Yunai, el gobierno de Calderón Fournier intentó en 1991 reactivar la producción bananera a través de cooperativas y apoyo estatal. En este contexto, el señor Echeverría Heigol apareció arrendando Finca Chánguina y Cuadrante Finca Tres a Coopalca del Sur RL; plantaciones bananeras que el señor Echeverría Heigol abandonó en el 2001, olvidándose de pagar los salarios adeudados, las prestaciones y las cuotas obrero-patronales de muchos meses a la Caja.
Los trabajadores se mantuvieron en estas tierras produciendo para subsistir, y pese a los desalojos violentos en julio del 2015 y febrero del 2016 que promovió el empresario Echeverría Heigol, aunque no era el propietario de las tierras, respondieron combativamente con la toma del puente sobre el río Térraba y la reocupación de las fincas, y finalmente lograron que el gobierno de Luis Guillermo Solís accediera a comprarlas y entregárselas a la cooperativa que formaron cuando Miguel Ángel Rodríquez les prometió darles tierras si hacían una cooperativa.
Los conflictos por la tierra se vienen agudizando ante la ofensiva de empresarios inescrupulosos, que intentan arrebatarle terrenos sobre los que no tienen derechos de propiedad a trabajadores piñeros y bananeros desempleados que subsisten en los mismos. En estos días han habido varios desalojos violentos en Los Chiles y no nos olvidemos de los asesinatos de dirigentes indígenas en el Sur.
Dejo al lector la tarea de juzgar la moral que priva en la burguesía costarricense. En la edición del Semanario Universidad del 2 de marzo del 2016 una investigación exhaustiva del periodista Vinicio Chacón establece que el empresario Echeverría Heigol le debía más de 4 000 millones de colones a la Caja, Fodesab, el IMAS, y el Fideicomiso de las deudas con el fenecido Banco Anglo que administra el Banco Popular, por cargas sociales y préstamos de sus empresas bananeras y mineras. Sin contar 1,7 millones de dólares que le pasó La Corporación Bananera Nacional (CORBANA) para que pagara deudas, de la plata que recauda el Estado por el impuesto a cada caja de banano exportada.
Antes de acusar al compañero Daniel, el señor Echeverría Heigol (y la UCCAEP que lo respalda) deberían decirle al país si de veras abonó a sus deudas con el Estado y cuánto debe todavía.
¡HAY QUE IR MAÑANA AL JUICIO A PREGUNTARLE!